Disfrutar del vino y del turismo a la vez ya no es un privilegio que solo algunos puedan aprovechar. El enoturismo en España lo puede practicar cualquier persona gracias a las rutas del vino accesibles.
La “Guía de Rutas Enológicas de España, Accesibles para Todas las Personas” es un proyecto desarrollado por la Plataforma Representativa Estatal de Personas con Discapacidad Física (PREDIF). Cuentan con el apoyo de Fundación ONCE y de Fundación Vodafone España. El proyecto no es nuevo, se presentó hace varios años.

Con estas rutas se busca facilitar a las personas con discapacidad y al público general información concreta sobre la accesibilidad de las Rutas del Vino de España y los establecimientos turísticos ubicados en ellas.
Pero no solo hablamos de bodegas, sino que el resto de oferta de las rutas del vino accesible es más amplia. Destacan los centros de interpretación del vino, enotecas, comercios especializados, como restaurantes tradicionales y de autor, alojamientos, oficinas de información turística, museos, monumentos, actividades lúdicas y otros servicios relacionados con la cultura del vino.
Así, existen 12 rutas del vino, de las 27 certificadas por la Asociación Española de Ciudades del Vino (ACEVIN). Las 12 rutas más accesibles son las siguientes:
- Ruta de Jumilla (Murcia)
- Ruta de La Garnacha Campo de Borja (Aragón)
- Ruta de La Rioja Alavesa (País Vasco)
- Ruta de La Rioja Alta (La Rioja)
- Ruta de Montilla-Moriles (Andalucía)
- Ruta de Navarra (Navarra)
- Ruta de Rías Baixas (Galicia)
- Ruta de Ribera del Duero (Castilla y León)
- Ruta de Ribera del Guadiana (Extremadura)
- Ruta de Rueda (Castilla y León)
- Ruta de Utiel Requena (Comunidad Valenciana)
- Ruta del Penedès (Catalunya).
¿Cómo son las rutas del vino accesibles?

Muy fácil: el hecho de disponer de infraestructuras que faciliten a personas con alguna discapacidad disfrutar del enoturismo. Por ejemplo, la Ruta del Vino Ribera del Duero cuenta 17 recursos turísticos accesibles. Entre estos recursos destacan bodegas, restaurantes, museos, alojamientos y otros establecimientos culturales visitables accesibles.
Además, un ejemplo a seguir es la bodega Viña Real de Laguardia, que recibió el Premio Especial al Mérito de Accesibilidad en Enoturismo. Se trata de una bodega pionera en apostar por la construcción de un espacio totalmente accesible para personas con discapacidad. También cuenta con letreros en braille en cada unas de sus salas.
En definitiva, gracias al compromiso de las rutas del vino accesibles, el vino lo podemos disfrutar todos.